Cuando se pierde todo (relato de una fotografía)

Había una vez un señor que vivía en Nueva York con su familia. Tenía dos hijas en la universidad y una esposa con la que llevaba 30 años de casado. Él trabajaba mucho y por eso se peleaba con su esposa muy seguido, hasta el grado de tomar la decisión de divorciarse. El día en que firmó los papeles, fue el mismo día en el que su empresa quebró y quedó desempleado. El señor estaba muy deprimido porque había perdido todo y ahora estaba solo.

Subió al último piso del rascacielos y se paró sobre el borde del precipicio. Reflexionó lo que había hecho de su vida. Se había esforzado mucho en mantener su matrimonio, pero ahora ya no tenía esposa. Había pasado la mitad de su vida trabajando y no había podido disfrutar de la infancia de sus hijas.

Al no encontrar salida a su depresión, dio un paso al frente y se dejó llevar. Mientras tanto, su ex esposa le marcaba desesperadamente a su celular, pero no obtuvo respuesta.